Siempre dispuesta a emprender nuevos caminos, allá me fui. Me llamaron, mejor dicho.
Y el viento cambió de dirección.
No aproveché una bandada de pájaros, como el Principito, ni salir de juerga Bukoskiana para aparecer en un nuevo planeta.
viernes, marzo 19, 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)